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jueves, 30 de junio de 2011

La guitarra

EMPIEZA el llanto
de la guitarra.
Se rompen las copas
de la madrugada.
Empieza el llanto
de la guitarra.
Es inútil
callarla.
Es imposible
callarla.
Llora monótona
como llora el agua,
como llora el viento
sobre la nevada.
Es imposible
callarla.
Llora por cosas
lejanas.
Arena del Sur caliente
que pide camelias blancas.
Llora flecha sin blanco,
a tarde sin mañana,
y el primer pájaro muerto
sobre la rama.
¡Oh, guitarra!
Corazón malherido
por cinco espadas.
Federico García Lorca

Con las noches


Amo la tenue luz que queda en la oscuridad
de la noche
cuando tu rostro
me muestra su gozo
Tenue luz en las sombras,
de mis faldas,
arropando en un cristal
mi cuerpo descubierto
y mi rostro indispuesto
Con la oscuridad de la noche
entierras con tus garras
los gritos de mi angustia
entierras en mi espalda
esas condiciones
se degrada con la noche
lo complejo de mi placer
y lo extenso de tu voluntad
Quiero con tu encanto
caer en tu sorpresa
dormir en tu constancia

Amo como carecen
nuestras mentes de verdades
y la colisión completa
de tu cama y mi sonrisa
la noche me sorprende
asusta mi delirio
pero compenetra
nuestros pies tan descalzos
y las uñas sin vergüenza
acariciando las cuerdas
de las curvas
largo y tendido manejando
la sospecha
cuando el placer se
pierde en tus labios.

lunes, 27 de junio de 2011

Don Casi Perfecto

Tengo un don casi perfecto
para mentir con mis palabras
Tengo un don exacto
para que no me encuentres
y una facilidad para
oscurecer el atardecer
Tengo una locura tan imprecisa
que provoca caos
un don tan preciso tan sólo
para causar problemas
Y tengo esa forma tan retorcida
de no saber de lo que hablo
Existe a mi alrededor una
forma tan dulce para provocar confusión
Tengo esa facilidad para decir
que no ha acabado cuando
tu ya cambiaste de rumbo
Tengo ese don con el que
aveces me levanto y me hiere
con el que ando por las calles
y aveces no me puedo quedar
con las ganas
Tengo esas ansias con las que
te alimentabas
y te preocupabas ,
me alteraba, me equivocaba
me abrazabas y me mirabas
Tengo cientos de maneras para
sonreírte y no entender que
lo que hago es una alivio
a un dolor para correr lejos
Aparece mis formas de expresar
que lo que busco es una soledad
tan cercana a tu corazón
Mi don me enseña como dispersar
esa sombra
que nunca se cansa de besar tu espalda
Un don instantáneo para
amar cuando el amor no es suficiente
cuando lo suficiente es amar
pero aun así sobra y falta algo
que cuadre con mi
inciten-cía por quejarme
Tengo un don que nos permite
conocernos y hasta agradarnos
pero al mismo tiempo
te avisa que mi desganada tristeza
y desesperación
te volverá a tu camino
Así que debo aprender de mi don
y tal vez algún día ya no sea
casi perfecto.

Tarde

Noviembre de 1919
TARDE lluviosa en gris cansado,
Y sigue el caminar.
Los árboles marchitos.
Mi cuarto, solitario.
Y los retratos viejos
Y el libro sin cortar...
Chorrea la tristeza por los muebles Y por mi alma.
Quizá
No tenga para mí Naturaleza
El pecho de cristal.

Y me duele la carne del corazón
Y la carne del alma.
Y al hablar,
Se quedan mis palabras en el aire
Como corchos sobre agua.
Sólo por tus ojos
Sufro yo este mal,
Tristezas de antaño
Y las que vendrán.
Tarde lluviosa en gris cansado,
Y sigue el caminar.
Federico García Lorca

jueves, 23 de junio de 2011

Si acaso necesite

No necesito mirar tu rostro para saber que me lastimaras
que tus ojos, extraña mirada, no dice más nada.
Haciendo historias donde nadie puede escucharnos
y aún así desprecias mi corazón
No necesito la inmensa tristeza que dejas en mi
Hay un color de tu respiro que era para mi
sólo para quedarme ahí.
No necesito de tu voz o tu sonrisa o tu amor
para saber que me avergüenza haberte amado
No necesito acomodar tu cuerpo en mi recuerdo
para sentir como rompes mi corazón
Haciendo relatos cortos como explicación
de tus besos vacíos
Hay un poquito de los dos que no dijimos
y otro tanto de mi estudiando la forma de uir,
no escuchando tus palabras haciéndome pensar
en tu encanto tan tuyo.
No necesito que te quedes para que te diga
que mi quietud se aleja de mi
No necesito los días que no respirabas
que no decías "abrázame"
Que acrecentamos los días con ambición de no hacernos
sonreír
que existe esa sensación de hacer notar
ese milagro hueco en nuestros sueños
que nos lleve a malas noticias
Y ya no espero extrañar a mi ir-recomendable soledad
para saber que lo que sentí extrañar era tu rostro
No necesito mirar a tu camino entendiendo que me
has apartado de el
y ya no es verdad escuchar el tipo de frases que impresionan
a mis oídos para no escuchar tus latidos
Y no necesitar despertar con un "Ya no te amo" pues es
sólo un pensamiento
que compartes con una media sonrisa
Y al final resulto que para hacernos el amor
necesitábamos amarnos
y ahora que no hay amor
parece sólo una escusa para hacernos creer que es real
lo que ene el fondo de la noche ya encontrábamos imposible volver verdad.
No necesito mirar a la ventana creer que te espero
que anhelo tu llegada
como no creo que tu me sueñas en cada luna
que me sientes en tus res-piros
Como no necesito recordar lo evidente
rompiste mi corazón como lo hice con el tuyo
que nos hace entender que ahora es un trato ya bien hecho.

sábado, 4 de junio de 2011

Larga sospecha

sospechando de la sonrisa que perfuma los suspiros
que se posa dulcemente en tus ojos
y se regocija en mi dolor
puedo penetrar en la idea
de quedarme a tu lado
y con todas las dudas que me aquejan

me acomodo con la cuantitativa
suma de café y ese fuego
tan abrumador fugándose de cada uno de los
cigarrillos que mi garganta a bebido
difuminando tu cuerpo humeante
en las noches pretendo viajar en el gozoso
y escuálido momento del día

desconfiando de tus palabras
posas tus pechos en mi ventana
pues esperas ser mi eterna compañía
contemplo tu pecho postrado en una escena
ensordeciendo tu voz entre mi vientre
y mi condena
te nombro cautelosa
pues el sexo se ha hecho tu estilo de vida
que me permite deseosa quedarme vacía

y es con tus bailes tan murmuran-tes que
despides mi complemento
con tu desdén de tu poca pasión por amar
me aterras la agonía
y la vaga venganza de pensarte
mi meas afilado a mi perdón
y a mi afligida disposición
por arrebatar todo en mi condena.